Hola a todas y todas.
A mí esto de escribir para
los demás no se me da muy bien, pero os tengo que contar una cosa que me pasó
ayer por la tarde, y con la que casi me salen demonios por la boca.
Por la tarde, cuidando a una
niña, me encontré con una vecina que sabe que estoy estudiando educación
infantil, (ella está como profesora ilegal, puesto que trabajó como ingeniera,
y al estar en el paro, una amiga suya la metió en su colegio como profesora de
primaria), me dice que es genial esto de trabajar en un cole por las vacaciones
que se tiene, y que además que no se hace NADA, que si en una hora los niños
van a música, que si luego a gimnasia, etc. vamos, que todas las horas
escolares, no se está con los niños.
Cuando la escuché decir esto
me hirvió la sangre, y con respeto y educación la explique que es que yo no
estaba estudiando educación infantil por las vacaciones, sino por los niños, y
que seguiría igual de contenta y de convencida con la carrera aun que estuviera
el doble de horas en el colegio y tuviera la mitad de vacaciones.
Pero, sin ninguna vergüenza
sigue diciéndome que encima, las de infantil hacemos muchísimo menos, porque
además en la hora de la siesta, incluso te puedes dormir tu también. Y que se
reía de las profesoras que se quejaban por su trabajo diciendo que estaban muy
agobiadas, que ellas no saben lo que es trabajar duro, y lo que es estar
agobiadas.
Para no seguir con esta
estúpida conversación la dije que tenía prisa y me subí hacia mi casa porque no
aguantaba más.
Sólo quiero decir, que la
gente que piensa así me da pena, espero que no haya ningún profesora o
estudiante de magisterio que haya hecho esta carrera por los motivos que me
decía esta vecina, porque si no me da lástima pensar que simplemente lo hace
por eso, estar estudiando una carrera que no te gusta, y dedicarte toda la vida
a ello.
Y para toda la gente que
piensa así, sólo decirles que es muy fácil estar en una clase, pero que es muy
difícil ser un buen profesor, ya que para ello lo primero es haber estudiado la
carrera y tener los conocimientos necesarios para ella, y lo segundo que si
piensan así están TOTALMENTE equivocados en TODO.
En primer lugar, es un
trabajo en el que hay que tener mucho cuidado ya que estás trabajando con
niños, no estás en una oficina sentado en frente de un ordenador.
En segundo lugar, no es tan
fácil dar una clase como poner fichas y echarse la siesta, sino que ellos deben
aprender experimentando, ya que para ellos, cada situación nueva y cada momento
de su vida es un nuevo conocimiento para su vida, por lo que debemos de estar
atentos de lo que decimos y de lo que hacemos. También ligado a esta idea,
debemos ser originales, pensar en ideas nuevas para que les motiven, lo cual no
tiene mucha gente. Debemos tener una mente abierta, ya que con niños de 3 años,
por ejemplo, no se puede tener organizada una clase puesto que pueden ocurrir
multitud de sucesos que les llamen la atención, y seguramente también les
sirvan para su educación, por lo que debemos de tener recursos para saber
llevar cada momento.
Otro concepto erróneo, es
que nuestro horario se basa en las horas escolares, debido a que al llegar a
casa debemos plantearnos las actividades del día siguiente.
Y por último quizás lo que
más grave me parece es que también nosotras nos podemos dormir en la hora de la
siesta. Estamos en nuestro horario de trabajo, quienes descansan son los niños,
puesto que con diferencia a nosotros tienen 3 años. No solo en este momento,
sino durante todo el día les puede pasar cualquier incidente, por lo que nosotras
como maestras debemos de estar atentas de ellos EN TODO MOMENTO, no les tenemos
que quitar el ojo de encima ni un solo segundo, puesto que podría ocurrir
cualquier accidente innecesario y evitable.
Con todo ello espero que la
gente que pensaba como esta señora, hayan cambiado la mentalidad sobre las
profesoras.
Para terminar, sólo decir
que si fuera un trabajo innecesario y sumamente fácil quizás no sería necesario
estudiar una carrera para entender y comprender a los niños, su momento
evolutivo, sus miedos, sus gustos, sus incertidumbres, los mejores métodos de
aprendizaje, etc. y podría continuar exponiendo todo lo que hace falta saber
para poder ser maestra y posiblemente nunca se terminaría.
Dos preguntas para estas
personas:
¿Entonces, por qué en países
como Finlandia la profesión de magisterio es considerada de las más
importantes? Está a la altura de medicina o de arquitectura.
Y segundo ¿qué pensarían si
van a un colegio para escolarizar a sus hijos y saben que sus profesoras no
tienen dicha titulación? Total, qué más da. ¿No?
Está en juego las personas
que formarán parte en el futuro de una sociedad activa, siendo ellos los
protagonistas.
Precioso. Tienes todo lo que debe tener una buena maestra: coraje, ilusión, amor a los niños, las ideas muy claritas y, además, te estás formando para conseguir la preparación que, por tu juventud te falta. ¡Animo!
ResponderEliminarTe lo anoto como voluntario.